sábado, 9 de agosto de 2014

Reinado de Carlos IV


Casa de los Cinco Gremios Mayores
Fotografía de Juan Carlos Alegría en www.juancato.com
con su amable permiso

Los Cinco Gremios Mayores (José de la Ballina 1788)
Los terrenos situados en Atocha 7, 13 y 15, y la Plaza de Jacinto Benavente (antigua plaza de la Aduana) fueron elegidos para la construcción del edificio de los Cinco Gremios Mayores. El proyecto, diseñado por el arquitecto José de la Ballina, recibió el visto bueno de Juan de Villanueva  en 1786 y empezó a realizarse en 1788.
Los cinco gremios representados como mayores eran los sederos, los joyeros, los merceros, los pañeros y los lenceros. El edificio que fue du sede es de estilo neoclásico de ladrillo, tiene tres plantas y una cubierta abuhardillada con balcones de granito. Es de constitución fuerte y hoy todavía resiste después de haber sido la sede de varios bancos: El Banco de Isabel II, luego fusionado con el Banco de San Fernando, y por fin el Banco de España hasta que este último cambió su sede a la calle de Alcalá y Paseo del Prado. En la casa de los Cinco Gremios Mayores hoy hay dependencias del Ministerio de Justicia.


Reconstrucción de la Plaza Mayor (Juan de Villanueva 1790)

Casa de la Panadería Plaza Mayor de Madrid tal como se ve hoy
Foto Carlos Delgado para Wikimedia Commons


El último de los múltiples incendios padecidos por la Plaza Mayor ocurrió en 1790 durante un día de gran calor y Sabatini junto a Hermosilla fueron encargados de las obras de extinción junto a ingenieros militares. Poco después, Juan de Villanueva se comprometió a reconstruir la plaza sin que vuelvan a producirse incendios por culpa de los materiales de madera utilizados durante siglos. Dentro de lo posible, usó materiales no combustibles (piedra y ladrillo) como lo hizo para el Museo del Prado. Los pisos pasaron a ser de cinco a cuatro, quedando la altura general ajustada a la Casa de la Panadería. Se entraba desde las calles cercanas por arcos de medio punto diseñados por Villanueva para dar paso a los carruajes. La Guerra de la Independencia ralentizó enormemente este trabajo que,  después de la muerte de Villanueva, llevaron a cabo dos de sus discipulos, López Aguado y Moreno, en 1854. 

Obra de Lorenzo de Quirós Ornato de la Plaza mayor para la llegada de Carlos III

Obra de Francisco Rizi Auto de fe en época de Carlos II (Museo del Prado) 


Real Observatorio Astronómico (Juan de Villanueva 1790 Parque del Retiro)

El Real Observatorio Astronómico  dibujado por Isidro Velázquez (o González Velazquez)
Biblioteca Nacional de España

Dibujo del Observatorio Astronómico Biblioteca Nacional de España
 
"El edificio del Observatorio Astronómico de Madrid fue proyectado por Juan de Villanueva en 1790, año en el que comienza a construirse bajo su dirección en los terrenos del Retiro llamados altos de San Blas, junto a la ermita que daba nombre al cerro. Con el Museo de Historia Natural (hoy del Prado) y el Real Jardín Botánico, el Observatorio se incluía en Madrid en un conjunto de establecimientos de patrocinio real dedicado al estudio de las ciencias experimentales, tan importantes en tiempos de Ilustración."  (Datos de la Biblioteca Nacional de España)
 
Vista del pórtico y de la rotonda (Guía de arquitectura de Ramón Guerra de la Vega)



Escuelas Pías de San Antón (Francisco de Rivas 1795 Calle Hortaleza)

Alzados originales de Francisco Rivas (Archivo de la Villa) para las Escuelas Pias de San Antón
 Fachada que mira a la calle Santa Brigida. y fachada que mira a la calle Hortaleza
Firma del visto bueno de Juan de Villanueva
(Guía de arquitectura de Ramón Guerra de la Vega) 


Los escolapios pidiron al rey Carlos IV disponer de la iglesia de San Antón y de los terrenos que la rodeaban para construir una escuela. La iglesia había sido construida por Pedro de Ribera en 1740 para los antonianos cuya orden luego desapareció.

 Iglesia de san Antón (2011)
Obra de Pedro de Ribera
Foto de Tamorlan para Wikimedia Commons


El rey accedió a la petición de los escolapios. Pero, a pesar de esta concesión, había que recaudar dinero para construir, lo que consiguieron. El arquitecto fue Francisco de Rivas. Rivas cambió la fachada del templo al estilo neoclásico conservando sin embargo su interior barroco y, a continuación de la iglesia, alzó dos pisos sobre un basamento almohadillado para la Escuelas. Arriba elevó una cubierta con buhardillas.

En la esquina de la calle Hortaleza y de la calle Santa Brigida había una fuente con Galapagos, obra de Ventura Rodríguez. La construcción de las escuelas la derribó para luego cambiarla en una bonita fuente de dos delfines entrelazados. Como recuerdo del anterior pilón de Ventura, se conservó su fecha: MDCCLXXII.

Fuente de los Delfines 
MDCCLXXII, año 1772
Foto Tamorlan Wikimedia Commons


Conviene recordar que, durante la invasión de los franceses, el colegio de San Antón fue convertido en Seminario de los nobles. En él, ingresaron los tres hijos del general Leopold Hugo, llegados a Madrid con su madre que huía de un compromiso político en la primavera de 1811, sin permiso del padre; éste no tuvo más remedio que escolarizarlos en este internado. Por fin consiguió que los dos más jóvenes vuelvan a Paris con su madre mientras que el mayor, Abel, se quedaba en la Casa de los Pajes de José I donde estaba desde el 1º de enero 1812, día de su presentación a la Corte.
El general "colocó a sus tres hijos en el internado que los Escolapios tenían en el colegio de San Antón, en la madrileña calle de Hortaleza que los ocupantes franceses habían convertido en un "seminario de nobles", ocupado apenas por una veintena de muchachos, cuando antes de la invasión napoleónica se atendía allí a quinientos pupilos." (Joaquín Leguina). En el internado mandaban dos escolapios muy duros que los chicos no olvidaron nunca.


Ermita de San Antonio de la Florida (Francisco de Fontana 1798 Paseo de la Florida)


Una de las cúpulas de la ermita de San Antonio de la Florida pintada por Goya al fresco
 Fotografía publicada por el ABC

En el actual paseo de la Florida, después de la primera ermita a San Antonio construida por el arquitecto y escultor Churriguera, Sabatini construyó otra. Finalmente, Carlos IV mandó derribar la ermita de Sabatini para la ampliación de los jardines cercanos. Cada uno lucha por sus propios proyectos sin respetar las obras anteriores. Pero el fervor popular para el santo obligó al rey a reconstruir otra ermita y la nueva fue encargada a un arquitecto llamado Francisco Fontana. Se pide finalmente a Goya hacer la decoración. Pero éste se sentía mal de salud y tuvo que esperar restablecerse para empezar una obra magnífica, terminándola en pocos meses en 1798: se trata de las cúpulas. Una de ellas es una obra maestra al fresco dispuesta como un trampantojo: aunque representa al pueblo de Lisboa esperando la llegada milagrosa del santo, se ven personajes castizos apoyados en una barandilla con gran realismo.


La ermita de San Antonio de la Florida Fotografía anónima de 1890

Para proteger la ermita de los movimientos litúrgicos, se construyó otra ermita gemela cercana para tal menester. El arquitecto Juan Moya la realizó. La ermita pintada por Goya fue cedida a la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando por el rey Alfonso XIII en 1928, cuando se inauguró el segundo templo.

Las ermitas gemelas vistas desde el teleférico
Foto Carlos Delgado para Wikimedia Commons 


Palacio de Villahermosa (Silvestre Pérez 1783 y López Aguado 1805)
 
Palacio del duque de Villahermosa
Pascual Madoz 
 
Este palacio, que es hoy el Museo Thyssen-Bornemisza, situado en el Paseo del Prado no muy lejos del Museo del Prado, se construyó sobre la parcela que los duques de Villahermosa habían adquirido en 1777 con un caserón de poca altura y estilo rococó. Los arquitectos Silvestre Pérez y López Aguado lo transformaron respectivamente en 1783 y en 1805 hasta llegar a ser un bonito palacio neoclásico y uno de los museos más preciados de Madrid.
 
Museo Thyssen-Bornemissa
Foto  Hywell Martínez para Wikimedia Commons



Fuentes: Biblioteca Nacional de España, Archivo de Wikimedia Commons, Pascual Madoz, Guía de arquitectura (1700-1800) de Ramón Guerra de la Vega,  Juan Carlos Alegría, ABC, Museo del Prado.

(Continuará)

Anne Barcat
 

6 comentarios:

  1. Hola Anne:
    Enhorabuena por esta nueva serie que inicias, dedicada al reinado de Carlos IV. Es posible que las contribuciones arquitectónicas y artísticas fueran menos ambiciosas que las del reinado de Carlos III, pero sólo con el Real Observatorio y los frescos de Goya estamos ante un legado más que notable.

    Abrazos, Jesús

    ResponderEliminar
  2. En efecto, Jesús, el reinado de Carlos IV no se puede comparar con el de Carlos III en plan urbanístico; pero el hecho de contar con Juan de Villanueva como arquitecto favorito y con Goya, pintor de cámara, ya tuvo dos artistas famosos y geniales para dejarnos importantes obras que hoy subsisten. También hay que recordar que este rey mandó terminar muchos trabajos del reinado de su padre, empezados o en proyecto.

    Gracias por estar siempre atento a mi blog.
    Un abrazo Anne

    ResponderEliminar
  3. Enorme y gratísima sorpresa la que me he llevado esta tarde al entrar en el blog y ver que se actualiza con sus interesantes artículos. Permítame felicitarla y rogarle que siga con él.
    Cm.

    ResponderEliminar
  4. Muchas gracias. Este blog ha quedado muy abandonado por el hecho de que he traducido una obra larga sobre la guerra de independencia vista desde el punto de vista francés, trabajo que ahora está terminado.

    ResponderEliminar
  5. Se agradece que trabajes en tantos frentes,las fotografías y los grabados,muy buenos.
    Un saludo de G.M.P

    ResponderEliminar
  6. Gracias, G.M.P, demasiado tarde, soy un desastre. Eso es, por trabajar en varios frentes a la vez, en efecto.
    Un saludo
    Anne

    ResponderEliminar